Las muestras se recibirán en el Departamento de Medicina Preventiva, Salud Pública y Microbiología de la Facultad de Medicina de la UAM, que se encargará de inactivarlas en condiciones de bioseguridad en un laboratorio P3. Una vez inactivadas, serán procesadas por los robots, que extraerán el ácido ribonucleico (RNA) del virus. Después, las muestras serán remitidas al Servicio de Genómica del Instituto de Investigaciones Biomédicas “Alberto Sols” para que puedan ser sometidas a las pruebas PCR. La Fundación Parque Científico de Madrid (FPCM) colaborará en el diagnóstico desde su unidad de Genómica y ha cedido un robot Kingfisher que permite extraer 96 muestras de RNA cada 3-4 horas.